Poesía de Miguel Gil Castro
Una noche en busca de agua
la vi por primera vez
(vestida de blanco
cantaba en quechua):
ante la luna llena.
No aprendimos a cantar,
el quechua no llegó a mi padre
(ella murió mucho antes
de que cumpliera veinte)
¿Mi afición por el frío
empezó esa noche?
Quién sabe.